Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
Este miércoles por la noche, Estados Unidos revivió algunos de sus peores fantasmas recientes cuando la Policía del Capitolio evacuó uno de los edificios de oficinas del Senado debido a una alerta sobre un posible tirador en la zona. Sin embargo, la alerta resultó ser una falsa alarma.
La Policía del Capitolio informó en un breve mensaje en la red social X que sus agentes estaban buscando tanto dentro como alrededor de los edificios de oficinas del Senado, pero no había “informes confirmados de disparos”.
Thomas Manger, jefe de Policía del Capitolio, confirmó que durante el operativo no se encontró “nada preocupante”. Afirmó que no hubo informes de personas que realmente hubieran escuchado disparos y que no hubo víctimas.
El edificio Russell fue evacuado y los agentes cortaron el acceso a los túneles subterráneos, mientras que el edificio principal del Senado permaneció abierto. La Policía del Capitolio advirtió a la población que se mantuviera alejada de la zona.
Esta alerta se produce mientras Estados Unidos aún está digiriendo la tercera imputación contra Donald Trump por hasta cuatro cargos relacionados con su intento de revertir el resultado de las elecciones presidenciales de 2022, que perdió ante Joe Biden. Este intento culminó con el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
Este jueves, el expresidente comparecerá ante el juez en Washington, dos años y medio después de unos sucesos que dejaron cinco muertos y un extensísimo balance de heridos y detenidos. Los eventos de ese día siguen siendo recordados como uno de los episodios más oscuros y peligrosos de la historia reciente de Estados Unidos.