En un movimiento indignante, la presidenta de las Cortes Valencianas, Llanos Massó (Vox), ha dado luz verde a una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) presentada por un ex militante falangista, Juan García Sentandreu. Esta propuesta busca aprobar una controvertida “ley de defensa de las señas de identidad valenciana”, que pondría entre espada y pared a las formaciones políticas, así como cualquier entidad o ciudadano que se oponga a sus disposiciones.
Escalada de la Ultraderecha en Valencia
La propuesta impulsada por García Sentandreu se plantea como una ampliación de la polémica Ley de Señas de Identidad, aprobada por el PP en 2015, que fue derogada por el Gobierno del Pacto del Botánico, liderado por el socialista Ximo Puig, tras fuertes críticas de diversas instituciones académicas y culturales.
La nueva versión de la Ley propuesta por García Sentandreu pretende sancionar el uso del término “País Valencià”, no sólo por los medios de comunicación, sino también por las empresas e incluso los particulares. Asimismo, el texto busca restringir la libertad de expresión en cuestiones lingüísticas, penalizando a cualquier partido político, sindicato, medio de comunicación o “sistema educativo” que afirme que el valenciano y el catalán son la misma lengua.
El texto incluye un fuerte componente punitivo, puesto que busca considerar los incumplimientos como “infracciones administrativas” que pueden dar lugar a sanciones. En el caso de los funcionarios públicos, la infracción sería considerada una “falta muy grave” que implicaría su suspensión inmediata y la apertura de un expediente disciplinario.
Un Ataque a la Democracia
Esta propuesta no sólo desafía los derechos fundamentales recogidos en la Constitución española, sino que también amenaza a gran parte de la sociedad valenciana, como la principal formación de la oposición -el Partido Socialista del País Valenciano- así como a los sindicatos CCOO y UGT, que utilizan en sus siglas la denominación de “País Valencià”.
La iniciativa cuenta con el apoyo de figuras importantes de la extrema derecha valenciana, como Manuel Latorre Castillo, presidente del Grupo de Acción Valencianista (GAV), y el ex candidato falangista Juan García Sentandreu.
Alarma Social: el Futuro de la Democracia en Valencia está en Juego
Esta propuesta agresiva representa un grave ataque a la libertad de expresión y cohesión social en la Comunitat Valenciana. En un momento de crisis política y social amplia, es crucial que todos defendamos firmemente los principios democráticos y los derechos humanos. La reacción de los partidos políticos, las organizaciones sociales y la ciudadanía en general frente a esta amenaza será clave para salvaguardar el estado de derecho en Valencia.
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