Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
La homofobia sigue presente en el fútbol en pleno siglo XXI. A pesar de los avances logrados en los últimos años, el deporte rey aún tiene mucho camino por recorrer en cuanto a aceptación e inclusión se refiere.
El fútbol francés ha sido el último en sumarse a esta polémica después de que varios jugadores del Toulouse se negaran a jugar un partido debido a tener que usar una camiseta con la bandera arcoíris, un símbolo del movimiento LGBT+.
La Ligue 1 y la Ligue 2 habían planeado usar las camisetas con la bandera arcoíris en todos los partidos de la jornada en el marco del Día Mundial contra la Homofobia y la Transfobia, que se celebra el próximo 17 de mayo.
Sin embargo, cinco jugadores del Toulouse, que actualmente es el campeón de la Copa de Francia, se negaron a usar la camiseta. Zakaria Aboukhlal, Moussa Diarra, Said Hamulic, Farez Chaibi y Logan Costa fueron los jugadores en cuestión.
El Toulouse FC confirmó la noticia a través de un comunicado, indicando que los jugadores del equipo profesional expresaron su desacuerdo sobre la asociación de su imagen con los colores del arcoíris que representan el movimiento LGBT+. A pesar de respetar las elecciones individuales de los jugadores, el club decidió despedir a dichos jugadores para el partido previsto para ese domingo en el Estadio de Toulouse.
El Toulouse FC recordó en el comunicado que en su plantilla profesional están representadas 18 nacionalidades y 5 continentes y que la apertura al mundo es una parte integral del ADN del club. El club también afirmó que los jugadores son elegidos por su calidad humana sin importar sus creencias o convicciones. Además, el club reiteró su compromiso de larga data con la lucha contra la homofobia y todas las formas de discriminación.
No es la primera vez que el fútbol francés está envuelto en polémica por la negativa de algunos jugadores a usar la camiseta con la bandera arcoíris. En segunda división, Donatien Gomis, defensa senegalés del Guigamp, también rechazó jugar esta jornada y no entró en la liga para viajar con el equipo a Sochaux.
El año pasado, Idrissa Gueye, entonces jugador del PSG, también se negó a jugar un partido con la camiseta con los colores de la bandera arcoíris, justificando su decisión por “convicciones religiosas”.