Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
Las obsesiones con historias basadas en crímenes reales pueden tener consecuencias mortales, como se ha demostrado en el caso de una mujer en Corea del Sur. La protagonista de esta macabra historia, identificada como Jung Yoo-jung, ha sido detenida por la policía de la ciudad de Busan, acusada de asesinar y descuartizar a un profesor.
Según informes del medio surcoreano The Chosun Ilbo, la policía cree que el motivo detrás de este asesinato fue la “curiosidad” de Jung por experimentar la sensación de quitarle la vida a alguien.
Durante el interrogatorio, la joven de 23 años inicialmente afirmó haber matado accidentalmente a la víctima durante una discusión. Sin embargo, más tarde confesó el horrendo crimen después de que la policía encontrara inconsistencias en su relato y su familia la instara a decir la verdad.
La obsesión de Jung por los asesinatos, alimentada por programas de televisión y libros sobre crímenes reales, la llevó a cometer este acto atroz. Según la policía, el historial de búsquedas en su teléfono reveló que había estado recopilando información durante tres meses sobre cómo ocultar un cadáver. También se descubrió que la mujer había visto numerosos programas de televisión y había tomado prestados libros sobre crímenes de una biblioteca local.
La policía está llevando a cabo pruebas para determinar si Jung sufre de psicopatía. La joven encontró a su víctima a través de una aplicación que conecta a padres con profesores privados, haciéndose pasar por la madre de un alumno para acercarse al profesor ahora fallecido.
Después de apuñalar y descuartizar a la víctima, Jung colocó algunas partes del cuerpo en una maleta, tomó un taxi y arrojó los restos al río Nakdong, aparentando una desaparición. Luego, compró bolsas de basura y lejía antes de regresar a su domicilio, donde procedió a descuartizar el resto del cuerpo. La mujer se quedó con el teléfono móvil, el carné de identidad y la cartera de la víctima, en un intento de cometer el crimen perfecto.
Sin embargo, el taxista comenzó a sospechar de las acciones de Jung y alertó a la policía. Durante la investigación, las autoridades encontraron ropa manchada de sangre en bolsas y el resto del cuerpo mutilado en la casa de la sospechosa.
Las autoridades revelaron que Jung era una persona solitaria y desempleada desde su graduación de la escuela secundaria hace cinco años. Este espeluznante caso ha dejado consternada a la comunidad local y plantea serias interrogantes sobre los efectos de la obsesión con crímenes reales y la influencia de los medios de comunicación en la conducta humana.