UNA JUVENTUD BAJO SITIO Ahed Tamimi, quien cumplió 17 años entre rejas, representa la juventud palestina que crece bajo el yugo de una ocupación que no distingue entre niños y adultos a la hora de ejercer su brutalidad. Su encarcelamiento en 2017 por ocho meses fue un claro mensaje de intimidación, un intento de aplastar la resistencia desde sus raíces. Pero lejos de extinguirse, el fuego de la protesta parece avivarse con cada injusticia. “No estamos contra los judíos, estamos en contra del sionismo. Es diferente ser judío y ser sionista”, distingue Tamimi, en un esfuerzo por desenmascarar la narrativa que a menudo se utiliza para justificar la represión. Una distinción que muchos parecen ignorar deliberadamente, confundiendo la crítica legítima de una ideología política con un ataque a una religión o a un pueblo. La historia de Ahed Tamimi es un microcosmos de la lucha palestina, una narrativa que se repite con alarmante frecuencia y que exige una mirada crítica y una respuesta contundente de la comunidad internacional. Es hora de que las voces que claman por la justicia y la paz se unan en un coro que no pueda ser ignorado, que las acciones de los opresores sean expuestas y que la resistencia pacífica sea reconocida como el derecho que es.Israeli occupation forces detain #Palestinian activist and ex-prisoner Ahed Tamimi after raiding her family home in the village of Nabi Saleh, northwest of Ramallah, in middle of the night. pic.twitter.com/OL69no4HYG
— Quds News Network (@QudsNen) November 6, 2023
Artículo original publicado en: Contrainformacion.es