Acusaciones del Partido Popular en Galicia apuntan a “manipulación digital” por parte del PSOE y BNG
Paula Prado, como representante del Partido Popular (PP), no se ha reservado en señalar duras acusaciones en contra de la oposición. Sin evidencia concluyente, alega que el Bloque Nacionalista Galego (BNG) y el Partido Socialista de Galicia (PSdeG) ha orquestado una “trama de manipulación digital”. El foco de la controversia radica en la presunta existencia de perfiles falsos en redes sociales que, según Prado, se utilizan para distorsionar la opinión pública sobre la crisis de los pellets en Galicia.
Un complot sin pruebas
En una conferencia de prensa, Prado presentó un informe que pretende demostrar la existencia de esta campaña de desinformación. Sin embargo, carece de la debida verificación que vincule directamente a la oposición, dejando un vacío en su argumento que alimenta las dudas sobre la estrategia del PP.
¿Teoría de la conspiración o desesperación política?
De la misma forma, el PP alega que esta operación de desinformación, llevada a cabo desde Madrid, opera en contra de Galicia y el PPdeG. No obstante, la falta de pruebas sólidas y el uso de “indicios” no verificados cuestiona la autenticidad de estas afirmaciones, atribuyéndolas a una posible desesperación política del partido.
La reacción del BNG
Por su parte, el BNG niega rotundamente las acusaciones del PP, argumentando que estas son resultado de la ansiedad y la inclinación al seguimiento de teorías conspirativas del PP. Este enredo político pone en duda la estrategia del partido, y plantea interrogantes sobre la salud del debate político y democrático en Galicia.
El laberinto de la “conspiranoia”
En un esfuerzo por combatir lo que percibe como una campaña de desinformación, el PP parece haber caído en las redes de la “conspiranoia”, lanzando acusaciones sin sustento concreto. Esta actitud añade cuestionamientos a la estrategia del partido y genera incertidumbre en el escenario político gallego, en un momento en el que la fatiga política parece ser predominante y el escenario electoral es incierto.
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