De acuerdo con un nuevo estudio del Observatori Metropolità de l’Habitatge de Barcelona (O-HB), un poco más del 23% de las viviendas en Barcelona están en manos de propietarios que poseen cuatro o más inmuebles. Esto significa que, de los 794.272 hogares que hay en la ciudad condal, 184.111 pertenecen a tan solo el 2% de los propietarios, quienes poseen una media de 15 pisos cada uno.
La investigación ha revelado una estructura de propiedad en la que, a pesar de ser todavía mayoría los propietarios con una sola vivienda, estos apenas representan el 55,5% del total de viviendas. A este porcentaje se suman un 23,2% de pisos en manos de grandes propietarios y un 20,9% que pertenecen a pequeños propietarios que tienen dos, tres o hasta cuatro inmuebles.
Los grandes propietarios superan a los pequeños
Las cifras desacreditan la noción de que la mayoría de las viviendas disponibles para alquilar pertenecen a personas que solamente poseen una segunda vivienda aparte de su residencia principal. En realidad, los propietarios que poseen cuatro o más inmuebles ya superan a los pequeños propietarios, con un 23,2% frente a un 20,9%.
De acuerdo con la ley de vivienda aprobada el año pasado, se considera “gran propietario” a aquel que posee diez viviendas o más, o cinco en zonas tensionadas, como es el caso de Barcelona. Este grupo podría verse afectado por la regulación de precios del alquiler, si ésta se lleva finalmente a cabo.
Entidades y particulares: dominio de la propiedad
El estudio también examina el tipo de propietario, diferenciando entre individuos y entidades. Aunque las entidades conforman solamente el 3% de los propietarios, controlan el 14,9% de todas las viviendas. Las empresas son los propietarios más numerosos dentro de esta categoría, poseyendo 95.329 pisos, superando a instituciones públicas, comunidades de propietarios y entidades sin fines de lucro.
Finalmente, el informe analiza la localización geográfica de las viviendas de los grandes propietarios. No es sorprendente encontrar que las zona céntricas, como el Barri Gótic y las áreas de mayor afluencia turística, tienen las tasas más altas de multipropiedad. Los distritos de la periferia, por otro lado, tienen tasas más bajas que la media.
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