Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
Si hay una figura que representa de forma desmesurada el desprecio por el diálogo, la civilidad y la cohesión social en nuestro país, esa es, sin lugar a dudas, Dani Dsk, el líder de Desokupa. Un personaje que, como ilustra perfectamente su reciente publicación en Twitter, parece estar más interesado en generar titulares escandalosos y agravios que en contribuir de forma positiva a la sociedad española.
“¿Qué tal el ridículo de esta tarde en el Congreso?”, bromea Dsk, con el desdén de quien confunde la vulgaridad con la valentía. Es evidente que para él, el debate político se reduce a una batalla de insultos, un campo de lucha en el que la única regla es la del golpe bajo. Pero, ¿qué tipo de liderazgo es este que se enorgullece de la humillación y la provocación? ¿Cómo alguien puede confiar en una organización que trata de forma tan despectiva a los que no comparten su visión?
“Hola @ionebelarra @PODEMOS. Qué tal el ridículo de esta tarde en el Congreso? Ni Pedrito os ha apoyado para ilegalizar Desokupa. Qué pena dais. Venga, a seguir soltando violadores, que ya os hemos dado un rato de tele. A llorar con Sinaí Bendiciones! #RatasyAnchoas #DesokupaManda”, fue el mensaje completo.
No contento con su ataque inicial, Dsk continúa su diatriba afirmando que Podemos está “soltando violadores”. Un argumento de lo más irresponsable, una acusación sin fundamento que no hace sino alimentar la polarización y el miedo. Es el clásico recurso de aquellos que carecen de argumentos sólidos y buscan causar revuelo a través de afirmaciones sin fundamento.
La respuesta de Echenique
La respuesta de Echenique, sin embargo, deja en evidencia la falta de sustancia en la retórica de Dsk. “Para acosar personas vulnerables no hace falta cerebro. Para hacer leyes sí”, señala el político, poniendo de manifiesto la diferencia entre las bravuconadas vacías de Desokupa y el trabajo serio y complicado que implica la política.
“Hola nazi. Te explico como Barrio Sésamo. Las leyes 1. Se registran (nadie vota, hoy) 2. La Mesa califica 3. El Gobierno desveta 4. Cupo para pleno 5. Toma en consideración (se vota, aún falta) 6. … Para acosar personas vulnerables no hace falta cerebro. Para hacer leyes sí.”, fue la contestación de Echenique.
Pero más allá del intercambio en sí, lo que realmente inquieta es la visión que Dsk y Desokupa representan. El uso de hashtags como #RatasyAnchoas y #DesokupaManda es más que una mera provocación, es un símbolo de la degradación del discurso público, de la trivialización de los problemas sociales y de la glorificación del abuso de poder.
Dsk y Desokupa, con su retórica del odio y su desprecio por la dignidad de los demás, son un claro ejemplo de lo que no necesitamos en nuestro país. Porque al final del día, las palabras importan. Y las palabras de Dsk, lejos de aportar algo de valor, solo contribuyen a fomentar la división y el antagonismo.