La madrugada de ayer presenció el final de La Tancada Migrant, un refugio para solicitantes de asilo y personas sin hogar que habían ocupado parte de las instalaciones de la antigua Escuela Massana desde la primavera de 2018. Esta acción se llevó a cabo bajo la dirección del actual gobierno municipal, manifestando el cumplimiento de sus previas advertencias hacia esta ocupación que surgió como llamado de atención a la necesidad de reformas en la legislación migratoria.
Desalojo en La Tancada Migrant
Un considerable dispositivo formado por la Guardia Urbana de Barcelona, acompañado por los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional, se desplegó al amanecer para proceder con el desalojo. Esta operación pretende marcar el fin de una ocupación que con el tiempo pareció distanciarse de sus raíces políticas, transformándose mayormente en un asentamiento para aquellas personas en situación de calle.
Reacciones y declaraciones
Desde el entorno del Raval, varios colectivos han expresado su descontento, señalando que más de 30 personas, todas en estado de vulnerabilidad, han sido desplazadas sin que se les proporcionara una alternativa digna por parte de los servicios sociales. Asimismo, se informa de varias detenciones realizadas durante el proceso del desalojo. Fuentes municipales han anunciado que a lo largo del día se harán más declaraciones.
Propuestas alternativas
Representantes de la Tancada Migrant y de diversas entidades del Raval han sostenido que, más que desalojar, se deberían haber buscado soluciones que abordaran directamente las problemáticas del refugio. Se sugería una mayor intervención social, la asignación de trabajadores sociales permanentes, o incluso una presencia más regular de la Guardia Urbana en la zona como medidas preventivas ante cualquier conflicto, en lugar de dejar sin hogar a decenas de personas en situación ya de por sí precaria.
Foto: autonomynews.org