La acumulación de marihuana continúa convirtiéndose en una problemática en las comisarías de Cataluña, poniendo en riesgo la salud y las condiciones laborales de los funcionarios de policía, según han advertido el Sindicato Autónomo de Policía (SAP-Fepol) y el Sindicato de Mossos d’Esquadra (SME-Fepol). Las plantaciones requisadas están causando malos olores y malestar general en los centros de trabajo, una situación que se repite con demasiada frecuencia, a pesar de las múltiples denuncias realizadas por los mismos sindicatos.
Situación insostenible en las dependencias policiales
La presencia de estos restos vegetales en los centros de trabajo no solo está generando un ambiente inadecuado y perjudicial para los efectivos policiales, sino que también está llegando a afectar negativamente a los vecinos cercanos a las comisarías de policía. Los sindicatos piden a la Generalitat que elabore un plan estratégico para poner fin a esta problemática.
Aflora la preocupación ante el incremento de delitos relacionados con la marihuana
Las organizaciones sindicales han subrayado que el cultivo y tráfico de marihuana ha aumentado de manera alarmante en los últimos años en Cataluña, lo que repercute directamente en la sobrecarga de estas plantaciones en las comisarías. Las dependencias policiales, señalan, “no están condicionadas para almacenar esta sustancia estupefaciente”.
Reclamación de medidas de actuación ante la acumulación de marihuana
Ante esta situación, las organizaciones sindicales de los mossos exigen “soluciones inmediatas y definitivas”, con la modificación de los protocolos de actuación y de la normativa vigente. De esta manera, se preservaría la carga de prueba de los comisos de sustancias estupefacientes evitando que la marihuana deba ser traslada a las dependencias policiales.
Los sindicatos reclaman que se ofrezcan soluciones eficientes ante esta problemática, ya que el contenedor instalado en la ciudad de Valls para depositar las plantas decomisadas está lleno y no puede acoger más material. Se requiere de una pronta solución para que los agentes y vecinos no tengan que continuar sufriendo las consecuencias de la inhalación de esta sustancia.
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