ERC y PSC han llegado a un tibio acuerdo para el decreto que regula la utilización de residencias con fines turísticos. En este acuerdo, se observa una notable desviación del planteamiento inicial del departament de Territori. Algunas de estas enmiendas causan desconcierto ya que podrían abrir puertas no deseadas. Según la regulación aprobada en noviembre, el número total de pisos turísticos no debía superar por cada 100 personas. Además, se exigía a los propietarios obtener una licencia urbanística en un periodo máximo de cinco años y renovarla cada cinco años. Sin embargo, el acuerdo recién alcanzado entre ERC y PSC, que consigue la convalidación del decreto ley, permite a los Ayuntamientos tener la facultad de decidir si quieren establecer un límite o no. En cuanto al tiempo de validez de la licencia, se mantiene en cinco años pero puede ser prorrogable de manera automática siempre y cuando el plan urbanístico lo permita.
El acuerdo reduce el número de municipios afectados por esta regulación a 140, donde el mercado residencial está tenso, y no los 262 municipios que habían sido planificados por Territori. Esto incluye áreas donde la alta concentración de viviendas turísticas podría causar un desequilibrio en el entorno urbano. Se ha determinado que cada municipio tendrá la autoridad para determinar si se encuentra en esta situación, en lugar de Territori.
Las modificaciones han sido aceptadas y se incorporarán en el texto para la aprobación final de la ley. La aprobación podría tener lugar en la última sesión plenaria que se celebrará el próximo mes de marzo.
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