Con una afluencia cerca de 6.000 personas, según datos de la Guàrdia Urbana, la ciudad de Barcelona vivió una enérgica manifestación por el 25 de noviembre de 2023, en conmemoración al Día Internacional para la Eliminación de la Violencia en contra de las Mujeres. La marcha se llevó a cabo bajo el lema “Hasta aquí. Queremos estar juntas, diversas, vivas, libres y rebeldes”, iniciando en la intersección del Paseo de Gracia con Diagonal y culminando en la Plaza de la Universidad donde se realizaron diversos discursos.
La fuerza feminista se manifiesta
A las 18:40 h, la cabecera de la manifestación arrancó con el resonante grito de “Viva la lucha feminista”. La visibilidad de la protesta se resaltaba con una pancarta que decía “Ya basta”, haciendo un llamado contra la violencia machista. La energía de la multitud no decayó durante la marcha, manifestándose especialmente a través del color morado, bailes y el ritmo de batucadas.
La manifestación convocó a la sociedad a tomar partido y se dirigió especialmente a los hombres para que se unan a la lucha feminista. Adicionalmente, se hizo hincapié en la necesidad de incorporar una educación con enfoque feminista y reconocer efectivamente los derechos de las mujeres.
Críticas a la política y la religión
La marcha no estuvo exenta de críticas dirigidas a las ideologías conservadoras, destacando entre ellos expresiones como “las religiones son misoginia” y “en mi cuerpo yo decido”, en referencia a los postulados contrarios al aborto. Asimismo, hubo voces en contra del líder del partido Vox, Santiago Abascal.
Cambios en la justicia
Entre los participantes de la marcha se encontraban diversas personas y entidades del movimiento feminista, quienes hicieron énfasis en el papel que juega el poder judicial en la lucha contra la violencia machista. Según la jurista Marisa Fernández, “La verdadera función de la justicia debería ser, no solo castigar, sino reparar”. Junto a ella, Dolo Pulido de Noviembre Feminista, destacó la necesidad de “más recursos para acabar con las violencias sexuales”.
Solidaridad con Palestina
El llamado de la organización de la marcha fue a asistir a la protesta con un pañuelo palestino en “solidaridad con las mujeres de Gaza y Cisjordania”. Los organizadores concluyeron que es vital apoyar a las mujeres palestinas “compartiendo su dolor por la pérdida de sus seres queridos y, sobre todo, de sus hijas e hijos”.
En este contexto, las acciones del alcalde Collboni y su nueva administración siguen pendientes de ser examinadas por grupos feministas y sociales que continúan luchando por los derechos de las mujeres.
