Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
En los últimos años, la ciberdelincuencia ha aumentado en España, según la estadística oficial. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, en 2019 se denunciaron 37.016 delitos cibernéticos, mientras que en 2021 y 2022 se denunciaron 53.049 y 64.437 delitos, respectivamente.
El crecimiento en tres años es de un 74,1%, y para las estafas informáticas, el crecimiento es del 78%. Detrás de estas actividades ilícitas, se encuentran delincuentes anónimos que han encontrado un mercado rentable en el negocio de alquileres de pisos, especialmente en ciudades como Madrid, donde hay una gran demanda tanto interna como de residentes interesados en tener una segunda residencia para pasar unas vacaciones.
La operación Rent Scam ha arrojado perfiles sorprendentes de sus cabecillas. Un preso español que cumplía condena en la cárcel de Navalcarnero, junto a su pareja, una mujer ludópata de Toledo, se hicieron de oro estafando a más de un centenar de personas.
La Semana Santa y el verano son épocas propicias para estos ciberdelincuentes. Mucha gente, especialmente estudiantes, busca alojamiento en la red para conseguir una vivienda de cara al nuevo curso universitario.
Los delincuentes utilizan diferentes modus operandi. Ahora, clonan páginas de portales conocidos como TripAdvisor o Idealista. También realizan copias casi idénticas de sus correos electrónicos. Los estafadores utilizan precios de mercado imposibles de cumplir para atraer a los incautos. Luego, los delincuentes los contactan por WhatsApp, les sacan dinero por adelantado y, en algunas ocasiones, sus datos de identidad y bancarios, haciéndose pasar por aseguradoras. Así, pasan a otro tipo de fraude informático: el phishing, que consiste en conseguir datos bancarios fundamentales para desplumar las cuentas corrientes de sus víctimas.
La policía aconseja a los usuarios que se aseguren de que la página o el correo electrónico son auténticos antes de realizar cualquier transacción. También sugiere no hacer pagos por adelantado y no enviar datos bancarios o personales a desconocidos. Asimismo, es fundamental que la población en general tome medidas de seguridad para evitar ser víctima de estas estafas, como el uso de software antivirus actualizado y la configuración de contraseñas seguras.
En la operación Rent Scam han sido detenidas 29 personas, aunque la investigación continúa en curso y actualmente hay 13 personas imputadas y se han esclarecido 128 casos de estafas, pero se cree que hay muchas más que aún no se han descubierto.
La operación se llevó a cabo de manera simultánea en varias provincias, incluyendo Madrid, Toledo, Ciudad Real, Pontevedra, A Coruña, Valencia, Alicante, Castellón, Ibiza, Bilbao, Santander, Huelva, Cádiz, Málaga, Granada, Murcia, Barcelona y Tarragona.
Esta operación comenzó el pasado septiembre después de un aumento en el número de denuncias de este tipo. La organización criminal estaba dividida en varios subgrupos liderados por un ‘hacker’ que ya estaba encarcelado. La organización fotografiaba viviendas en zonas atractivas y luego las anunciaba como propias en anuncios webs legales a un precio sin competencia.