Tras la introducción de las nuevas restricciones de tráfico que obligan a los ciclistas a desmontar en veinticinco calles del distrito de Ciutat Vella, se ha abierto una brecha entre los partidos Comuns y el Partido Socialista en el Ayuntamiento de Barcelona. A pesar de la posibilidad de formar un gobierno de coalición municipal, estas medidas han suscitado un fuerte desacuerdo. La desaprobación de los Comuns se manifiesta en las palabras de su portavoz, Janet Sanz, quien ha expresado su desacuerdo con las restricciones en una contundente declaración.
Sanz, hablando en nombre de los Comuns, ha señalado que consideran que estas restricciones a las bicicletas son “incoherentes” mientras se permite el tránsito de vehículos de motor. Según Sanz, el Partido Socialista “no solo va en contra de las bicicletas, sino también en contra del clima, de la salud y, sobre todo, de los vecinos”. También ha criticado la medida como un intento de favorecer el turismo masivo a costa de los residentes, y ha pedido que se permita nuevamente la circulación de bicicletas.
Medidas que perjudican a los residentes de Ciutat Vella
Desde el Ayuntamiento del PSC se han tomado decisiones que van aún más allá de limitar el uso de las bicicletas. Janet Sanz ha querido recordar también la eliminación de Zonas Acústicamente Tensionadas durante la noche (ZATHN), la apertura de nuevos hoteles y la permisividad con las terrazas. Según Sanz, estas medidas ponen de relieve que, para el PSC, “Ciutat Vella no es un distrito para vivir, es un parque temático con privilegios para el turismo masivo y los negocios privados”.
Las decisiones del ayuntamiento están expulsando a los residentes, ya que, como ha afirmado Sanz, los nuevos hoteles quitan las casas, las terrazas provocan ruido y los coches quitan espacio público.
Demandas de los Comuns
Los Comuns han pedido que se abra un debate con los residentes y comercios del Barrio Gótico, y han exigido la retirada de los señales de tráfico y el restablecimiento del tráfico de bicicletas en las 25 calles afectadas.
Sanz también ha recordado que aún quedan por resolver otras medidas en materia de movilidad en bicicleta, como el futuro del carril bici en Via Augusta y la nueva ordenanza de circulación, medidas que el actual alcalde no ha conseguido consensuar con los demás grupos municipales.