La noticia de la semana (junto con la ola de calor) es la nueva propuesta del gobierno de tramos para los autónomos para 2025. El comienzo de este plan está fechado para 2023. La mitad de los autónomos pagará menos con el nuevo sistema pero este sigue recibiendo duras críticas.
El Ministerio de la Seguridad Social ha conseguido cerrar el consenso con los agentes sociales y las principales organizaciones de autónomos para esta nuevo reforma.
Finalmente, tras una larga negociación con el Ministerio de Escrivá, la Asociación presidida por Lorenzo ATA ha alcanzado un acuerdo:
La tabla con las cuotas quedaría tal que así:
Lo que vemos a continuación es una ilustración de la cuenta de La Mandanga en la que se subraya cómo, incluso con la nueva reforma, la gente que gana menos es la que más paga y viceversa, siendo esta una de las grandes críticas de estos nuevos tramos.
El caso francés
En el país vecino el pago funciona de otra manera. Los autoentrepreneurs (así es como se llaman los autónomos en Francia) que se dediquen a actividades comerciales deben abonar el 12% de sus ingresos al Estado, el 18,3% en caso de dedicarse a profesionales más liberales y el 21,3% los que se dediquen al sector servicios.
Al pago de esta cuota, deberán añadirle la Declaración de la Renta, que les obliga a pagar:
- El 14,5% de sus ingresos hasta 7.000 euros al año.
- El 28,5% hasta los 20.100 euros.
- El 37% hasta 40.000 euros.
- El 45% hasta 80.000 euros.
- El 48% con ingresos por encima de los 80.000 euros.
Vista la propuesta llegamos a la conclusión que estos nuevos tramos, más allá de solucionar algunos problemas a los que se enfrentan los autónomos no acaban de ser una reforma efectiva, y por lo tanto, mejorable. Las reacciones son variadas, pero no acaban de ser positivas.