El escándalo por las muertes en las residencias durante la pandemia de COVID-19 sigue persiguiendo a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. En una nueva sesión de la Asamblea de Madrid, la oposición no ha cesado en sus esfuerzos por aclarar la situación y han surgido acusaciones de que los informes policiales sobre las inspecciones a los centros de mayores podrían desaparecer en circunstancias “misteriosas” si la justicia obliga a su divulgación.
Acusaciones de ocultamiento por parte del PP
Durante la jornada, el PSOE ha anunciado su intención de llevar a la justicia la ley que, según afirman, reduce la capacidad del Consejo de Transparencia de la Comunidad de Madrid y otros mecanismos regionales de control. En respuesta a estos señalamientos, Ayuso ha apuntado a Pedro Sánchez como presunto responsable de la ocultación de información, alegando que la oposición busca montar un “circo” sin fundamentos.
Críticas veladas a Catalunya
Además de las acusaciones relacionadas con la pandemia, Díaz Ayuso ha vuelto a enlazar indirectamente la reciente sequía en la comunidad con la política catalana, reavivando las críticas del Presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, quien calificó de “indecente” la asociación de la crisis hídrica con los toros realizada por la líder madrileña la semana anterior.
Disconformidad con la gestión sanitaria y educativa
Las protestas por la supuesta deficiencia en la inversión en sanidad y educación que realiza la Comunidad fueron otra de las cuestiones que tuvo que enfrentar Ayuso durante la jornada. Frente a las acusaciones de mala gestión, la presidenta madrileña defendió su administración hablando de su récord en la realización de mamografías y prometió garantizar las prácticas para los alumnos de Formación Profesional.
Presunta compra de los medios
Las inversiones en publicidad institucional también se pusieron en la mira durante la Asamblea, con una acusación proveniente desde Vox, partido que ha insinuado que Ayuso ha “comprado” a los medios de comunicación. Devolviendo el golpe, la presidenta madrileña tildó a la formación de ultraderecha de “victimista” y encuadró a su líder, Rocío Monasterio, en la línea de los “progres”.
Desafíos pendientes
El enredo de las residencias, junto con los desafíos en sanidad y educación y las tensiones con Catalunya, marcan el camino a seguir para la presidenta Ayuso y su gobierno. El tiempo dirá si logran transformar las dificultades en oportunidades o si estos problemas marcan un giro en el rumbo político de la Comunidad de Madrid.
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