Últimamente le gusta mucho al alcalde de Madrid compararse con Ada Colau. “Orgulloso de ser la antítesis de la señora Colau.” sentenció Almeida en un tuit hace poco. Pero… ¿a la ciudadanía cuál de las dos alcaldías nos va mejor? ¿En el 2022 es mejor vivir en la Madrid de Almeida o en la Barcelona de Colau?
Como toda pregunta en política, la respuesta depende de quién la contesta. Aunque como millennial progre, no soy proclive a los políticos de derechas trajeados, al pensarlo un poco he conseguido identificar algunos perfiles que podrían puntuar la Madrid de Almeida por encima de la Barcelona de Colau. ¡Veamos cuales!
1.Es mejor vivir en Madrid que en Barcelona…Si eres comisionista. Si eres amigo del primo de un político y quieres lucrarse con dinero público, rascarás más bien poco en el Ayuntamiento de Barcelona. Bajo el liderazgo de Colau, se ha creado un buzón ético para que los trabajadores de la casa puedan denunciar libremente cualquier mala praxis que detecten. Y quienes han intentado buscar casos de corrupción no se han salido: todas las querellas contra el gobierno actual que tanto ruido hicieron en su día han sido archivadas. Mientras tanto, en Madrid, solo tienes que hacer un par de llamadas para poder embolsar tranquilamente 6 millones de Euros con la venta de mascarillas al doble de precio de mercado.
2. Si solo te mueves en vehículo privado. Si de vez en cuando bajas a pie para hacer la compra, sacar al perro o llevar a los niños al cole, te conviene vivir en Barcelona, donde se está ganando un millón de metros cuadrados de espacio público pacificado al coche, el equivalente a 100 manzanas del Eixample. No obstante, para quien jamás pise la calle de su barrio, ya le parecerá bien la política de Almeida, que consiste en deshacer las pocas zonas pacificadas por el anterior gobierno y dejar vía libre a los coches.
3. Si vives de rentas. Si vives de especular con la vivienda, harías bien de huir de Barcelona, donde se ponen multas a manos llenas a bancos que tienen pisos vacíos y a plataformas como Airbnb que publicitan pisos turísticos ilegales. Es más, Colau ha obligado a los promotores privados a hacer un 30% de vivienda social. En cambio, Madrid sigue apostando por la economía del pelotazo y desplegando la alfombra roja a los rentistas y fondos buitre.
4. Si no eres mujer ni ninguna mujer te importa. Si eres mujer o hombre a quién te importa alguna de nosotras, Barcelona es tu ciudad aliada; ha integrado una perspectiva de género en todas las políticas, desde el urbanismo hasta la seguridad para caminar hacía la igualdad de género. ¡Hasta ha creado un canguro público gratuito! En cambio, si quieres que tu ciudad baile al ritmo de Vox, que se subvencionen entidades antiaborcionistas en vez de las que defienden los derechos LGTBI, el Ayuntamiento de Madrid está contigo.
5.Si te gustan los fantasmas. Las cocinas fantasma, quiero decir. Son estos lugares oscuros donde se produce comida en cantidades industriales para entrega a domicilio y que, de paso, arrasan con la restauración local a la vez que generan muchas molestias para el vecindario. Pues en Barcelona se han regulado y prohibido en las zonas residenciales con tal de proteger el comercio local y la calidad de vida, mientras que en Madrid proliferan libremente por toda la ciudad. ¡Que aproveche!
6. Si el gris es tu color preferido. Barcelona se tiña de verde. Tiene un plan para llenar la ciudad de naturaleza con la creación de 18 hectáreas de espacios verdes nuevos. ¡Eso quiere decir calles, plazas y cubiertas llenas de árboles y flores! Pero si prefieres vivir en una ciudad gris y sin vida, súmale un punto más a Madrid, donde Almeida se enorgullece de desmantelar macetas de plantas para colocar aparcamientos.
7. Si formas parte del 1%. En Barcelona, paga más impuestos municipales quien más dinero tiene y, además, el plan contra el fraude fiscal que puso en marcha Colau en el 2016 ha permitido recaudar 65,7 millones de euros que hasta ahora no se cobraban para invertir en los servicios públicos. Por el contrario, Almeida ha bajado los impuestos a los más ricos y, como consecuencia, Madrid ha dejado de ingresar 500 millones de Euros, el equivalente a todo el presupuesto de obras.
8. Si eres negacionista de la crisis climática. Ante la propuesta de ampliar el aeropuerto del Prat, Colau fue de los pocos políticos que hizo caso a la ciencia y los movimientos ecologistas que nos dicen que hay que reducir las emisiones de CO2 y no aumentarlas si queremos que el planeta sea habitable y se posicionó en contra. La respuesta de Almeida a la negativa de Colau fue pedir la ampliación de Barajas. Si tu también crees en cuentos de hadas de crecimiento eterno, disfruta de las (cada vez más frecuentes) noches tórridas de Madrid.
9. Si no tienes ni boca ni mente. Si dependes de la sanidad pública y te importa la salud bucodental y mental, Barcelona te ofrece servicios pioneros en el Estado: un dentista municipal y un servicio de soporte psicológico gratuito (Konsulta’m). Desde luego, si no tienes ni boca ni mente, (¡o si puedes permitirte pagar un dentista y psicólogo privados!), estas políticas no tendrán ningún interés para ti.
10. Si eres loser. Barcelona no para de ganar premios y encabezar rankings internacionales. Es la ciudad que más inversión social hace por habitante en toda España, la 16a mejor ciudad del mundo para vivir, la 11a más segura… y ha recibido los premios New European Bauhaus, de Vivienda Responsable Europea y el reconocimiento de la ONU por sus políticas de sostenibilidad. Mientras tanto, Madrid lleva años pasando más bien desapercibida en el escenario internacional gracias al liderazgo del PP. Así que si eres más bien derrotista y buscas una ciudad con ‘perfil bajo’, Madrid te irá como el anillo al dedo.