
Artículo original publicado en: Contrainformacion.es
La Asociación de Defensa Ambiental Salvemos Cabana publica un documento de alegaciones al proyecto poniendo a disposición de todas aquellas personas interesadas un escrito listo para su entrega a la Administración en ir.gl/alegapenadosmouros y recuerda que el plazo de envío a la Xunta concluye el jueves 20 de junio.

El texto realiza en 16 páginas un análisis pormenorizado de la documentación del parque eólico que la multinacional EDP Renovables pretende instalar entre las localidades coruñesas de Laxe, Vimianzo y Camariñas en los todos los ámbitos del mismo, que van desde la conveniencia del mismo en el actual contexto energético de Galicia hasta el impacto del proyecto sobre paisaje, biodiversidad y ámbito social y económico.
Salvemos Cabana considera que la plan diseñado por la empresa «pasa por alto y de manera notoria» algunas de las recomendaciones del Ministerio para la Transición Ecológica, que en 2020 dio a conocer un conjunto de directrices elaboradas por la Red de Autoridades Ambientales, constituida a propuesta de la Comisión Europea y coordinada por el propio organismo.
En este sentido, los especialistas abogan por evitar proyectos que se desarrollen en áreas donde perjudiquen las estrategias de desarrollo local o rural del territorio «o sean incompatibles con otras formas de desarrollo sostenible susceptibles de generar más empleo o de fijar más población en el medio rural».
De igual modo, debe evitarse la instalación de parques eólicos «que generen gran rechazo en la población local» y que instalen sus infraestructuras a menos de 2 kilómetros de núcleos habitados y áreas con usos sensibles como el residencial, sanitario, docente o cultural.
Por otra parte, las autoridades consideran que tampoco deben instalarse este tipo de proyectos energéticos en espacios pertenecientes a la Red Natura 2000 y su entorno inmediato con radios de protección que oscilan entre los cinco kilómetros para zonas especiales de conservación (ZEC) y de hasta diez en zonas de especial protección para las aves (ZEPA) con presencia de especies protegidas de quirópteros.
Además, los técnicos consideran que tampoco deben afectarse a lugares de interés geológico -como en el caso de los Penedos de Pasarela y Traba-, y que tampoco deben instalarse parques eólicos «en el entorno de paisajes naturales o culturales protegidos, de áreas con objetivos de calidad paisajística o de áreas englobadas en catálogos de paisajes singulares o sobresalientes».
FALTA DE LICENCIA SOCIAL
Finalmente, Salvemos Cabana destaca que el proyecto del parque eólico Pena dos Mouros también ignora las recomendaciones de la propia Xunta de Galicia en lo que a licencia social se refiere, pues la «Guía de criterios de integración paisajística de parques eólicos» publicada por la Administración autonómica explicita que «se está extendiendo en el ámbito internacional el concepto de la consecución de la SLO (Licencia Social para Operar) como marco útil en el desarrollo eólico». El colectivo considera que, en esta línea, la promotora no plantea ningún sistema de validación social al respecto anunciando en cambio un plan de visitas guiadas a posteriori con el parque eólico una vez instalado por lo que la aprobación previa de la población, que en este caso debe considerarse esencial, es «completamente inexistente».
«En este punto es necesario tener presente que las propiedades particulares de los residentes en el área de influencia de un parque eólico, como viviendas y terrenos edificables, bajan su valoración económica de manera notable una vez instalado el proyecto, porque al fin y al cabo nadie quiere vivir de manera consciente con la problemática derivada de la instalación de aerogeneradores de grandes dimensiones en la proximidad de la zona donde tiene establecida su vivienda y proyecto vital» -concluye la entidad ambientalista-.