La reforma laboral aprobada por el Ejecutivo griego el pasado mes de septiembre, conocida como la «Ley Georgiadis», ha entrado en vigor en Grecia desde el 1 de julio. Esta nueva legislación permite a las empresas de producción continua imponer una sexta jornada laboral a sus empleados con un recargo del 40% sobre la base salarial diaria. Las trabajadoras y los trabajadores no pueden negarse a realizar esta sexta jornada de trabajo. Según el Gobierno griego, la medida busca mejorar la competitividad y suplir la falta de trabajadores cualificados.
Sexta jornada laboral en Grecia
El antiguo ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Andonis Georgiadis, actualmente ministro de Salud, afirmó que se trata de “una medida excepcional y siempre en base a las necesidades de producción”. Sin embargo, los sindicatos temen que esta nueva medida se normalice y se convierta en la norma, abriendo las puertas a jornadas laborales más largas y perjudicando a la clase trabajadora. Syriza, el principal partido de la oposición, ha calificado la situación como “volver a las condiciones laborales del siglo XIX”.
Nuevas leyes laborales en Grecia
De momento, la ley se está empezando a introducir en el sector industrial, en empresas de producción continua. Esta normativa también afecta algunos convenios colectivos que sobrevivieron a las medidas de austeridad impuestas por la Troika. Además, está prevista su futura aplicación en el ámbito de la restauración.
Jornada de 13 horas diarias
La legislación incluye otras medidas, como la posibilidad de tener un segundo trabajo a tiempo parcial de un máximo de cinco horas diarias para quienes ya trabajan a jornada completa. Aunque no se establece una jornada laboral de 13 horas obligatoria, se permiten jornadas más prolongadas, algo que los sindicatos rechazan.
Flexibilización de despidos y sanciones
La reforma también flexibiliza los despidos: un trabajador puede ser despedido durante el primer año de contrato sin aviso previo y sin derecho a indemnización. Asimismo, prevé sanciones más duras contra los piquetes, con penas de hasta seis meses de cárcel, y regula los «empleos a demanda», conocidos como contratos de hora cero, que son controvertidos a nivel europeo.
Desde la aprobación del paquete de reformas, sindicatos y ciudadanía se han movilizado para mostrar su rechazo. Hoy en Atenas se ha convocado una manifestación organizada por los sindicatos para recalcar que los derechos laborales deben prevalecer sobre los empresariales.
Foto: www.swissinfo.ch